Con las bajas temperaturas propias del invierno, aumentan las enfermedades respiratorias, pudiendo manifestarse con un cuadro respiratorio alto, en el que afecta nariz y faringe, incluso pudiendo llegar a una otitis o sinusitis. O como un cuadro respiratorio bajo, impactando los pulmones, como la bronquitis o en casos más graves, la neumonía.
Las condiciones ambientales que se presentan durante el invierno favorecen la propagación de virus, como el resfrío común, la influenza, el virus sincicial respiratorio y el adenovirus. Ya sea de origen viral o bacterial, las enfermedades respiratorias están presentes a lo largo de todo el año, pero es en invierno cuando aumentan los casos, son el principal motivo de consulta en los servicios de urgencia durante esta estación.
Los niños menores de 5 años y los adultos mayores, especialmente si tienen alguna enfermedad de base, son más propensos a enfermar, sin embargo, todos podemos tomar medidas preventivas para estar mejor preparados para el invierno.
¿Cuáles son factores que favorecen las enfermedades respiratorias durante el invierno?
Producto del frío, es normal que no ventilemos con tanta frecuencia los espacios cerrados, no solo eso, además que busquemos algún sistema de calefacción para mantenernos más cómodos, encerrados en nuestro hogar, esto puede ser una combinación nefasta
Aunque no lo parezca, el interior de una casa puede llegar a tener el aire más nocivo que el exterior. La contaminación intradomiciliaria se produce cuando se conjuga la falta de ventilación y un sistema de calefacción inadecuado. Para poder generar calor, los sistemas de calefacción consumen oxígeno y liberan Co2, si no cuentan con un adecuado sistema de evacuación, quienes ocupen un espacio de esas características, respirarán esos gases, sufriendo irritación de las vías respiratorias.
La mayor cercanía física también es un aspecto para considerar. Las manos juegan un rol importante, si una persona tose, se suena o estornuda, y no lava sus manos, contagiará a otras personas al tocarlas.
Medidas de prevención
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Una alimentación balanceada, con ingesta de frutas y verduras de la estación, que aporte las vitaminas y minerales necesarias para fortalecer el sistema inmune, es el primer paso para prepararse para el invierno.
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Mantener espacios ventilados diariamente y evitar lugares aglomerados.
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En el caso de ser posible, preferir métodos de calefacción limpios como el eléctrico, los radiadores y la losa radiante. En el caso que tenga un sistema de calefacción contaminante, como una chimenea, o estufa a parafina, mantener alguna ventana semiabierta para ventilar, en el caso de las estufas, prender y apagar en el exterior.
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El lavado de manos, taparse la boca con un pañuelo o el antebrazo, en lugar de la mano, al momento de estornudar y toser.
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Vacunarse contra la influenza, especialmente los grupos de riesgo, menores de 2 años, adultos mayores, embarazadas y enfermos crónicos.
Especialmente en el caso de los cuadros respiratorios superiores, la limpieza nasal adquiere relevancia. Stérimar, es un microspray con agua de mar rica en minerales que limpia, humecta y descongestiona la nariz, esto es ideal para quienes viven en ciudades altamente contaminadas y con mala ventilación, ya que al usar Stérimar se puede mantener la nariz limpia.
Quienes son asmáticos y alérgicos son más propensos a sufrir enfermedades respiratorias, la limpieza nasal con Stérimar también es beneficiosa para estas personas. En estos casos, Stérimar Uso Diario, al ser una fórmula isotónica, puede ocuparse por un periodo prolongado, sin causar resequedad o irritación en la mucosa.
